En los medios de comunicación encontramos cientos de artistas o influencers aparecer con sonrisas extremadamente blancas y alineadas. Tras esa imagen se nos ha hecho creer, a la mayoría de la población, que eso es una sonrisa ideal, pero desde el punto de vista profesional, nos lleva a contradicciones entre odontólogos. Sin embargo, conocer el proceso e indicaciones de las carillas dentales es importante, pues nos ayudará a construir un criterio adecuado.

Las carillas dentales son fundas o láminas relativamente delgadas que se pegan a la superficie anterior del diente, es un tratamiento que ayuda a restaurar la estética y, en algunos casos, su función. Pueden ser elaboradas de diferentes materiales, pero siempre carecen de un núcleo de metal.

Las carillas dentales son de mucha utilidad en los siguientes casos:

·      Manchas que no se pueden eliminar mediante limpiezas o blanqueamientos

·      Fracturas dentarias

·      Malposición

·      Irregularidades en la forma y tamaño de las piezas dentales

·      Sustituir la apariencia de un diente ausente a otro con importancia estética

·      Espacios notables entre los dientes anteriores (sin ausencia de alguna pieza)

Existen parámetros para definir la forma, color y tamaño de los dientes adecuados para cada persona, según sus características:

·      Corporales

·      Faciales

·      Origen étnico

·      Sexo

Sin embargo, es en este punto donde, debido a las tendencias actuales, dejamos atrás estas consideraciones para solo obtener una sonrisa blanca, alineada y sin las características de una dentadura armoniosa como observamos en la imagen anterior.

Ahora podemos observar más casos de personas que tienen una sonrisa en desarmonía con lo antes mencionado y que, al parecer, ha sido adoptado como la normalidad.

El procedimiento de las carillas dentales llega a ser realizado por meros temas de estética, entonces podemos considerar este proceso como invasivo o mutilador, debido a que involucra el desgaste (tallado o reducción) del diente para disminuir el tamaño de la pieza dental sana y darle cabida a las carillas dentales o también a las coronas, que podrían complementar el tratamiento y modificar la posición de los dientes con la apariencia deseada por el paciente.

Al realizar este proceso, causamos daños irreparables a los dientes y ponemos en riesgo su salud, ya que una de las consecuencias de ponerse carillas puede ser que la pieza dental presente sensibilidad a las temperaturas, derivado de los desgastes o tallado de dientes, que dejan más expuesto al nervio, además de fragilidad en su estructura.

Las carillas dentales pueden ser la solución más rápida, sin embargo, existen otros tratamientos que pudieran ayudarnos a mejorar la estética, sin la necesidad de realizar este tipo de procedimientos.

La preocupación por tener una sonrisa estética ha llegado a puntos en los cuales, mediante tendencias en redes sociales se incita a las personas (principalmente jóvenes) a tener los dientes limados con utensilios para uñas, y de esta manera lograr darle la forma deseada, aunque se dañe al esmalte dental. Esto, entre otras varias tendencias y remedios caseros que hoy en día están al alcance de todos.

Es importante no fomentar estas conductas; se pone en riesgo la salud de los dientes y podría causarles un daño irreparable.

Ante cualquier duda, acércate con los profesionales de la salud oral, los odontólogos de Fundación Best, para aclararlas y realizar cualquier tratamiento que brinde una mejora estética mediante los procedimientos adecuados.