CUIDA TU SALUD

Ponemos a su disposición información de interés que le ayudará a saber más acerca de enfermedades y acciones relacionadas a cuidar su salud y la de su familia.

Malos hábitos orales: ¿cómo evitar dañar tus dientes?

Malos hábitos orales: ¿cómo evitar dañar tus dientes?

Desde la infancia nos inculcan los cuidados necesarios y correctos para nuestra salud bucal, como el cepillado tres veces al día, uso de hilo dental y la visita periódica al odontólogo. Pero, además de conocer los métodos adecuados para la protección de nuestros dientes, también existen malos hábitos orales que realizamos de forma cotidiana, dañinos para nuestra salud dental.

¿Cuáles son los malos hábitos orales?

Los más comunes:

  • Succión digital (chuparse el dedo)
  • Uso de chupón
  • Respirador oral (hacerlo por la boca en lugar de la nariz)
  • Morderse las uñas
  • Deglución atípica (tragar de forma inadecuada)

Malos hábitos orales en niños

Succión digital: es el más común, se puede presentar en niños que sufren depresión, aburrimiento, o ansiedad. Genera tranquilidad e induce al sueño, pero también tiene grandes perjuicios en el desarrollo de los dientes:

  • Inclinación hacia delante de las piezas superiores
  • Mordida abierta
  • Paladar profundo y hundido
  • Dificultad para juntar los labios
  • Problemas en el lenguaje

Uso excesivo de chupón: los problemas más comunes son tener una mordida abierta y deformidad en el paladar. Este artefacto se debe evitar después de los 24 meses y, en caso de que ya se haya presentado una malformación bucodental, acudir al odontopediatra.

Respirador oral: el 30 % de los pacientes infantiles tienen dificultad para respirar por la nariz, debido a alguna obstrucción funcional o anatómica (tabique desviado, inflamación de la mucosa por infecciones o alergias) que los obliga a hacerlo por la boca. Su consecuencia es la alteración facial, la falta de saliva que puede ocasionar caries y problemas para deglutir los alimentos.

Deglución atípica: consiste en la colocación inadecuada de la lengua al momento de consumir alimentos; por lo general, es un mal hábito infantil. Como resultado, los dientes se desplazan hacia adelante.

Malos hábitos orales en adultos

Morderse las uñas: también conocido como “onicofagia”, puede darse tanto en adultos como en niños; provoca desgaste de los dientes y puede causar una infección, debido a las bacterias u hongos acumulados entre las uñas, así como caries, alteraciones en la mandíbula, mal aliento y sensibilidad dental.

Las consecuencias de los malos hábitos orales generan gran deterioro en nuestra salud bucodental, así como alterar el crecimiento craneofacial; es importante conocer cada uno de estos problemas y entender que continuar con los malos hábitos orales puede ocasionar un daño irreversible en la dentadura.

La prevención de los malos hábitos orales conlleva la visita periódica al dentista para establecer un diagnóstico, reconocer el mal hábito y prescribir un manejo adecuado. El tratamiento con aparatos, terapia de lenguaje o funcional son algunos de los procedimientos.

Lo más importante como paciente es reconocer los malos hábitos orales, algunos de ellos los vemos como algo habitual y no creemos que generen un daño. Por ello, debemos acudir a una revisión dental para descartar o detectar a tiempo cualquier problema en la cavidad oral, y no olvidar que se debe ser constante en el tratamiento indicado.

Ante cualquier duda, acércate con los profesionales de la salud oral, los odontólogos de Fundación Best, para aclararlas y realizar cualquier tratamiento que ayude a la prevención de malos hábitos orales.


Compartir esta nota:  

CUIDA TU SALUD