Ponemos a su disposición información de interés que le ayudará a saber más acerca de enfermedades y acciones relacionadas a cuidar su salud y la de su familia.
Una frase que nos da miedo sólo con oírla es “¡vamos al dentista!”, y más cuando con anterioridad hemos acompañado a alguien y en la sala de espera se escucha ese ruido de los aparatos que utilizan los odontólogos.
Odontofobia o miedo al dentista, por sorprendente que parezca, es un trastorno de ansiedad que desata una crisis de angustia o ataque de pánico. Las personas comienzan a anticipar consecuencias negativas sin que estas hayan ocurrido. Por desgracia, la fama de los dentistas a lo largo de los años no es la mejor, aunque, es cierto, hay quienes ha tenido experiencias desagradables.
¿Qué consecuencias se tiene al tener miedo al dentista?
Miedo al dentista en niños
La atención odontológica, especialmente en los niños, ocasiona miedo y ansiedad. Lo enfrentan con gritos, berrinches y llanto, entre otras conductas de rechazo. Así, se dificulta la relación odontólogo-paciente y se genera conflicto para realizar un tratamiento de manera rápida y eficaz.
¿Cómo calmar los nervios antes de entrar al dentista?
En los pequeños es necesario que el dentista:
Para los padres o tutores de niño:
Miedo al dentista en adultos
En el caso de las personas adultas, pensar en la posibilidad de adquirir alguna infección por el uso de los instrumentos dentales, o bien, que sean lastimados por algún instrumento del dentista, o una mala experiencia en el pasado. Todo ello produce una inquietud enorme y puede convertirse en ansiedad a lo desconocido.
¿Cómo calmar los nervios antes de entrar al dentista?
Ante cualquier duda, acércate con los profesionales de la salud oral de Fundación Best. La comunicación entre dentista y paciente será la clave para una agradable experiencia en la consulta.